Nuestra Percepción

En el estudio de la estructura de la experiencia subjetiva humana, se ha ratificado que los seres humanos aprendemos a través de programas que se instalan a nivel inconsciente para garantizar nuestra supervivencia. Estos programas se organizan en redes neuronales que se establecen en nuestro sistema nervioso y que expresamos con la ayuda del lenguaje. Las investigaciones por el biofísico y biólogo molecular Pjotr Gargajev demuestran que el ADN puede ser reprogramado por palabras y frecuencias determinadas. Sus estudios señalan que nuestro ADN no solo es responsable de la construcción de nuestro cuerpo, sino que almacena y comunica datos.

Nuestro Mapa Mental, como se lama en PNL, nos hace comprender que el comportamiento de cada persona tiene una influencia sobre su entorno, que las creencias y el lenguaje generan un efecto sobre el cuerpo y que las acciones de las personas están guiadas por su propio modelo del mundo. El ser humano tiene una forma de entender la realidad determinada por el  modo en que capta la información y la descifra a través de su sistema neurológico: Filtro Neurológico y le da un significado que vendrá condicionado por el lenguaje que utiliza, la época en la que vive y el comportamiento social de su entorno: Filtro Social y por sus experiencias y gustos personales: Filtro Individual. El ser humano siempre se está proyectando a sí mismo frente a los acontecimientos que le rodean. Es decir, no ve la realidad objetiva, sino su propia interpretación que está condicionada por los programas inconscientes. Es la película grabada en su mente.

El ser humano percibe la realidad a través de los 5 sentidos, que dicho sea de paso vienen con unas limitaciones genéticas. A través del sentido de la audición, un perro no obtiene la misma información de la realidad que un ser humano, nosotros captamos hasta 20000Hz, mientras que los perros perciben sonidos de una longitud de onda de 40000Hz. Que no puedas oír, ver algo no significa que no exista. Tú no puedes oír las ondas de radio aquí, aunque sabes que están, solo tienes que poner una radio y ya está.

Y ahora una pregunta ¿Hace ruido cuando cae un árbol y no hay nadie en el bosque para oírlo? Pues la respuesta es No. Ya que lo único que hace el árbol es mover el aire que llega a nuestros oídos, pasando por todo un sistema que lo transforma en impulsos eléctricos que hace que nosotros escuchemos ¡¡BOOOM!! Para que haga ruido tiene que haber un receptor que interprete esas ondas. Que es lo mismo que hace la radio con las ondas de radio. Por lo tanto, los sentidos nos engañan. Nos dicen que la tierra es plana, cuando todo el mundo sabe que es redonda. Nuestros sentidos nos dicen que la Tierra está quieta, aunque se sabe que se desplaza a mucha velocidad. Lo mismo ocurre con la vista, tenemos un sistema para captar las imágenes a través del ojo, que son procesadas en la parte occipital del cerebro. No todos procesamos las mismas imágenes de la misma forma, dando lugar a interpretaciones diferentes, es lo que sucede a las personas con daltonismo. Que donde la mayoría ve rojo, ellos perciben una información diferente debido a su distinto procesamiento de información a nivel neurológico.

Toda la información que perciben nuestros Filtros Neurológicos ya generan en la persona un estado emocional. Luego esta información que pasa por los Filtros Sociales, es decir la cultura del entorno que nos rodea, los prejuicios y creencias del entorno social, las creencias del entorno más próximo como la familia, la familia del trabajo, la familia de los amigos, etc. Todo esto condicionan nuestros verdaderos sentimientos, que los ocultamos por creer que no son buenos o morales. Por creer que no se puede odiar a papá o a no sé quién.

Los Filtros Individuales, se puede resumir en las experiencias vividas durante la edad cronológica de la persona. Estas experiencias determinarán luego los pensamientos, los sentimientos y las creencias de la misma persona. Por lo tanto, llamamos Mapa Mental a la forma individual de entender la realidad. La percepción de la realidad es la percepción de nuestra realidad. Cuando las personas dicen: “No, es que es la realidad”, la respuesta es: “Mentira, es tu realidad”.

La información que recibimos a través de los sentidos se codifica según nuestros sistemas representacionales: visual, auditivo, cinestésico, olfativo y gustativo, se registra, se almacena y se va conformando nuestro mapa. La información que percibimos del exterior es entendida desde diferentes niveles:

1- Realidad de primer orden (evidencias sensoriales).

Todo aquello que se pueda constatar y verificar sensorialmente. Previamente a esto tendremos un código en el que nos habremos puesto de acuerdo. Por ejemplo: “mi marido se llama Juan” frente a una afirmación de este tipo, todos estaremos de acuerdo en responder sí o no. Es la realidad verificable, se puede comprobar y verificar. Otras: “Hace sol o llueve”.

2- Realidad de segundo orden (interpretaciones personales)

Son mis apreciaciones, por ejemplo: “Mi marido se llama Juan y es apuesto y trabajador”. La segunda frase es una interpretación, no todos tenemos la misma opinión o la misma idea de “trabajador” o de “apuesto”. “Es bueno que llueva” o ” Que día más beno”, es otro ejemplo de realidad de 2 orden.

3- Realidad de tercer orden (cómo me siento con mi interpretación frente a esa realidad)

Por ejemplo: “Soy una persona desgraciada porque mi marido no es atento conmigo”. La interpretación de lo que piensa, la conclusión, el significado que le atribuimos a la interpretación sensorial, todo esto nos ancla en los estados internos.

Pues bien, tanto a la realidad de 2 y 3 orden se le llama en PNL “Alucinaciones” Las alucinaciones están relacionadas con los filtros sociales e individuales mediante los que filtramos nuestras experiencias. No es lo mismo decir “ese mueble es bonito” que decir “me gusta ese mueble”. La primera frase parece decir lo mismo que la segunda, con el matiz que en esta última, es mi opinión, mi interpretación. Y en la primera frase parece que “bonito” sea algo que define el mueble de forma inequívoca. Como si fuera un Dogma. Los conflictos de comunicación empiezan aquí.